Adaptarse, una palabra de moda. Casi como reinventarse.
Palabras que al volverse modas se vuelven vacías. No por ello dejan de ser importantes
Adaptarse no sólo es transformar la empresa en tiempos de crisis. No sólo es crear nuevos proyectos (spin-offs, si se quiere). No sólo es dar un giro 180º en pocos días.
Puede tener algo de eso, tal vez. Pero adaptarse tiene una base más importante.
Adaptarse también es ajustar el rumbo. Olvidar planes dogmáticos y metas fijas para entender los contextos y afrontarlos.
Adaptarse también es aceptar lo que no se puede controlar. Eso requiere valentía y estoicismo.
Adaptarse también es entender que no podemos solos. Ni el abogado es más importante que el financiero, ni el ingeniero más importante que el artista, ni el fabricante más importante que el agricultor.
Adaptarse no sólo es una mentalidad necesaria en tiempos de crisis. Es una actitud fundamental en cualquier momento. Una que mezcla la reflexión y la ejecución. Una que se alimenta de la curiosidad y el optimismo para ser mejores.
Así entendemos la adaptabilidad en Pinzón Pinzón & Asociados Abogados. Así queremos vivirla en todo lo que hacemos.